El Último Diente de León: Una Historia sobre la Vejez, la Memoria y el Silencio en los Animales

El Último Diente de León

Copito era un conejo anciano.
Sus patas ya no eran tan ágiles y su pelaje blanco se había vuelto grisáceo en algunas partes. Sus orejas, antes erguidas y atentas, ahora descansaban suavemente hacia los lados, como si cargaran el peso de los años.

Vivía solo en una pequeña madriguera al borde del bosque, un lugar que alguna vez compartió con sus hermanos, compañeros de juegos, carreras y tardes de sol bajo los árboles.

Cada día, al despertar, Copito salía a su prado favorito, el mismo donde había crecido y donde todo parecía tener más vida cuando él era joven.
Pero ahora, el campo estaba más silencioso.
Los colores, más apagados.
Y los juegos… eran solo recuerdos.


🌼 Un último resplandor

Una mañana de primavera, mientras el aire olía a tierra mojada y el cielo estaba despejado, Copito encontró algo que lo detuvo:
el último diente de león amarillo.

Todos los demás habían sido devorados o se habían marchitado.
Pero ese, solitario en medio del prado, brillaba como un pequeño sol.

Copito se sentó frente a él.

Lo miró durante horas, como si pudiera beberse el color, el aroma, la dulzura de su juventud, y la compañía que ya no estaba.
En ese momento, no estaba solo. Estaba con sus recuerdos.

Al atardecer, una brisa suave recorrió el prado.
Los pétalos del diente de león se soltaron, uno a uno, bailando en el aire hasta perderse entre las sombras del bosque.

Copito cerró los ojos, y sintió cómo una parte de él también se desvanecía con ellos.
Una parte que no dolía… solo se despedía.


📚 Final:
Creado por sobreanimales.com
Una historia sobre el paso del tiempo, la memoria silenciosa de los animales, y cómo incluso en la soledad, la naturaleza sabe dar un último gesto de ternura antes del adiós.

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